domingo, 23 de enero de 2011

No todos los elefantes son rojos

Hoy me di cuenta de la importancia de  cambiar completamente de sociedad para darse cuenta de la relatividad de las cosas.

Estaba yo en la ducha pensando qué me iba a poner hoy, en cuantas capas de ropa debía ponerme para los 30 grados bajo cero de hoy, cuando me acordé del frío de la casa chilena cuando hacen 10 grados afuera y unos 15 adentro cuando mucho. Recordé la humedad entumecedora de aquellos cubos de cemento y el terror de pensar en la cuenta del agua y del gas que lo hacían salirse del agua caliente tras tres o cuatro fantásticos minutos. Si es que ese día no se había cortado el agua en todo el barrio. Me consolé. No hace frío, estoy en Canadá en una casa canadiense.

Luego para pasar el rato entre el champú y el acondicionador, me puse a cantar. "Un elefante se columpiaba sobre la tela de una araña. Como veía que resistía fue a buscar un camarada." Y me acordé que ese mismo elefante, en México, simplemente va a buscar "otro elefante". ¿Será que en Chile los elefantes son comunistas?

No sé. Pero donde sea, el frío y los elefantes son relativos.

3 comentarios:

DaL dijo...

Mi Trautmann querida, me agradó la reflexión, esto desde que soy una activista pro-tangibilidad de pensamientos efímeros; aún así tengo un par de observaciones que podrían servir a la ejecución de dicho proceso, ahí te van:

1. Si bien, lindo, también me parece que el texto carece de una columna vertebral, es decir, no veo clara una intención... cómo decirlo... no sé, literaria (?). Sin embargo, tampoco podría sugerir cambios precisos, porque posiblemente -y esto, por mi culpa- no le entendí bien (carita de pena) a lo que querías plasmar.

2. La brevedad puede ser el problema; si desarrollaras un poco más, la idea sería más rica.

Bueno, todo esto desde mi perspectiva, espero sirvan de algo mis comentaritos. Y si no, con gusto espero el debate.

:)

KAT dijo...

La verdad no tenia ninguna idea clara ni hilo conductor... A ver cómo lo arreglo...

Olivier dijo...

Wow Karina de verdad me encanta este texto! Tienes una manera bonita de decir las cosas :)